Edición especial: Influencia de las expectativas en el efecto de un medicamento placebo

En el alivio del dolor

Sofía Ríos Linares, estudiante de VIII ciclo de Psicología de la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas

El efecto placebo se define como una intervención diseñada para simular una terapia médica o psicoterapéutica. Esta sustancia carece de efectos específicos para la condición que está siendo aplicada; sin embargo, produce algún efecto curativo si el paciente la recibe convencido de que tal sustancia posee tal acción (Lam & Hernández, 2014). A lo largo del tiempo, se ha sabido que el efecto de una píldora no solo depende de sus propiedades farmacológicas específicas, sino también de las expectativas del paciente (Wager & Atlas, 2014). Las expectativas funcionan como construcciones mentales estables y difícilmente modificables debido a que, si están relacionadas con los efectos específicos de los medicamentos placebos, los pacientes las consumirán por más tiempo y con más regularidad, lo cual posibilita a que haya una adherencia al tratamiento farmacológico y satisfacción hacia el cumplimiento de sus expectativas (Wan et al, 2015).

Por ello, existe evidencia que propone que las creencias y expectativas pueden moldear efectos terapéuticos como adversos de cualquier fármaco prescrito. Por ejemplo, los autores Enck et al. (2017) investigaron cómo las expectativas modifican la eficacia analgésica de un fármaco en voluntarios sanos a través del uso de imágenes cerebrales. Ante ello, encontraron que la expectativa positiva hacia el tratamiento mejoró sustancialmente en el alivio del dolor, mientras que la expectativa negativa del tratamiento interfirió en el tratamiento farmacológico, provocando fuertes dolores. Por consiguiente, se sostiene que la expectativa de un paciente sobre la efectividad de un fármaco influye en su eficacia terapéutica y que los mecanismos cerebrales reguladores se distinguen dependiendo de la expectativa. En este sentido, cualquier tratamiento farmacológico comprende componentes fisiológicos y psicológicos que no siempre son observados en contextos experimentales.

No obstante, diversos estudios sobre placebo reflejan que existen respuestas médicas positivas y negativas después de la administración de una sustancia inerte o entorno simulado; es decir, las expectativas positivas se incrementan aún más de que los pacientes experimenten respuestas positivas al fármaco después de la primera dosis y si es que se tiene expectativas negativas puede bloquear los efectos de los medicamentos placebos. Las respuestas son originadas por variables psicosociales que forman parte del tratamiento, como la expectativa del resultado o interacciones entre el médico-paciente. Por lo tanto, en este ensayo se pretende determinar la influencia de las expectativas en el efecto de un medicamento placebo en el alivio del dolor.

En primer lugar, el éxito de la terapia farmacológica requiere de la adherencia hacia el tratamiento, el cual está en función de las expectativas positivas o negativas que el paciente posee sobre los medicamentos (Aguilar et al, 2016). Ambas expectativas se vinculan por experiencias previas, aprendizaje personal y por el tipo de comunicación de los médicos, quienes ofrecen información sobre los beneficios esperados de los medicamentos. A modo de ejemplo, un resultado positivo tras ingerir un medicamento placebo refuerza la elección a seguir eligiendo ese mismo fármaco; sin embargo, si no cumple con las expectativas del paciente y produce un efecto negativo se atribuye a una mala suerte. Así es como se forma el aprendizaje asociativo, en el que los pacientes aprenden que un estímulo no activo, como la pastilla placebo, puede tener efectos curativos mediante experiencias repetidas con fármacos que sí han provisto de efectos exitosos. Esta asociación es más fuerte cuando las expectativas previas del paciente son inducidas por sugestión verbal (Wager & Atlas, 2014).

"Estudios consistentes aseveran la existencia de una actividad reducida en los campos del cerebro vinculada con el dolor y la emoción cuando las creencias de los pacientes son mantenidas a través de este aprendizaje asociativo".

Por otra parte, estudios consistentes aseveran la existencia de una actividad reducida en los campos del cerebro vinculada con el dolor y la emoción cuando las creencias de los pacientes son mantenidas a través de este aprendizaje asociativo (Wager & Atlas, 2014). Adicionalmente, se dice que los tratamientos inertes, presentados como de un coste elevado, tienden a generar mayores expectativas de mejora de salud que los tratamientos menos costosos. Un ejemplo de ello sería el de una cirugía, la cual causa mayores expectativas de mejora clínica que la aplicación de una crema cutánea (Espay et al., 2015).

En segundo lugar, la expectativa hacia la respuesta farmacológica se compone de dos aspectos: (a) la probabilidad de que el fármaco tenga el efecto esperado, es decir, el paciente espera que los componentes de la pastilla logre modificar su estado de salud, y (b) la creencia individual de que ocurra el cambio (Zhou et al., 2019). En relación al primer aspecto, se asocia un mayor efecto placebo con un nivel mayor de expectativa debido a que el procedimiento al que está expuesto el paciente induce estas expectativas sobre su eficacia, por lo que intervienen en el efecto (Wei et al., 2018). Asimismo, existe evidencia en el estudio de Zhou et al. (2019) que muestra que los efectos placebo fueron influenciados por el nivel de expectativa y otros factores, como el optimismo, la disposición y el estado de ansiedad. La evidencia demuestra que los pacientes con altos niveles de optimismo y bajos niveles de ansiedad mostraron mayores respuestas al placebo después de los tratamientos. Por ello, ser más optimista o menos ansioso posee una influencia positiva en la experiencia de un tratamiento con placebo, puesto que estas personas poseen una tendencia a tener expectativas positivas.

Otro punto importante a recalcar, de acuerdo con Martín (2020), es cómo un medicamento placebo posee un efecto en el alivio del dolor, lo cual se puede dividir en tres etapas: (a) el efecto calmante del placebo se transfiere hasta los sensores de dolor y frenan esa transmisión; (b) las expectativas previas, así como la esperanza del paciente, se manifiestan en las estructuras profundas del encéfalo, en el cual se ubica el sistema de recompensa neuronal que hace que seamos propensos a repetir conductas o estímulos que nos agradaron en el pasado; y (c) en el hecho de que en la corteza prefrontal se inhiben las áreas encargadas del procesamiento del dolor y la negatividad. En relación a ello, a través de un tratamiento placebo se podría modificar las prioridades del paciente, cuya enfermedad o dolor pasaría a ser un primer puesto en su vida, por lo que de esta manera se pondría más esfuerzo en mejorar su salud y en cambiar sus hábitos cotidianos y consumir una pastilla al día (Ceniza et al., 2019).

En tercer lugar, la teoría de las expectativas asevera que las conductas sugestivas, como palabras de aliento por parte del médico, a la par con la administración de un placebo, pueden producir una respuesta fisiológica. Una cantidad significativa de estudios han demostrado cómo responde el cerebro a un placebo para disminuir el dolor. Por ejemplo, uno de los estudios de la Universidad de Michigan demostró que el efecto placebo se vincula con los analgésicos naturales del cerebro, ya que todos sus participantes experimentaron una disminución en sus niveles de dolor después de recibir el placebo. Tal parece que la expectativa de alivio del dolor ocasionaba que se activara cierta zona del cerebro disminuyendo de este modo la sensación de dolor (Aruhuanca, 2017). Asimismo, se puede ver una liberación de neurotransmisores como la oxitocina y la dopamina mejorando la calidad de vida de los pacientes (Ceniza et al., 2019).

En cuarto lugar, una adecuada relación entre el médico-paciente contribuye a aumentar la adherencia al tratamiento y favorece el efecto placebo. Cuando el médico posee la fuerte convicción de que el fármaco funcionará, emite una poderosa expectativa a un paciente esperanzado en sanarse y probablemente logre un significativo mediador de la eficacia terapéutica (Lam & Hernández, 2014). Por lo tanto, la significación que se le otorga a un fármaco puede ser un predictor respecto al grado de adherencia que tendrá el paciente (Núñez, 2015). Por ello, una expectativa positiva sobre lo que le va a causar el medicamento puede tener efectos directos sobre su adherencia al tratamiento y, por consiguiente, sobre la efectividad del tratamiento (Diego & Robert, 2019).

En conclusión, las expectativas juegan un rol muy importante en el efecto clínico de los pacientes, ya que a través de diversas investigaciones se ha demostrado que las atribuciones que las personas realizan con respecto a su tratamiento refuerzan y mejoran su salud. Asimismo, estas expectativas se relacionan directamente con la adherencia al tratamiento, pues si los pacientes ven que la pastilla placebo cumple con los efectos esperados, la consumirán por más tiempo y con más regularidad. Cabe resaltar también que es importante ampliar la extensión de los resultados hacia otros campos de la psicología, como la psicología social o experimental, para poder contribuir con el conocimiento científico y profundizar en la comprensión de este fenómeno desde el criterio psicosocial. Además, permitirá entender que los individuos son agentes activos en el proceso de restablecimiento de su salud. Además, sería esencial investigar si los medicamentos placebos aseguran su éxito en todas las patologías, ya que resulta controversial en el ámbito clínico; sin embargo, es necesario tener en cuenta si existe evidencia científica de que el uso del placebo beneficia al paciente en su salud y alivia su dolor.

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Bibliografía

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Ceniza, G., González, H., y Varela, E. (2019). El efecto placebo en el tratamiento del dolor musculoesquelético cervical: un ensayo clínico aleatorizado. Clínica y Salud, 30(3), 155-161. doi: http://dx.doi.org/10.5093/clysa2019a23

Diego, L., & Robert, L. (2019). Efecto placebo y nocebo: Cómo utilizar el efecto placebo y evitar el efecto nocebo para optimizar el tratamiento en la práctica clínica. Scientia Salut, 30(10), 55-60. https://scientiasalut.gencat.cat/bitstream/handle/11351/5067/BIT_2019_30_10_cas.pdf?sequence=2&isAllowed=y

Espay, J., Norris, M., Eliassen, C., Dwivedi, A., Smith, S., Banks, C., Szaflarski, P. (2015). Placebo effect of medication cost in Parkinson disease: A randomized double-blind study. Neurology, 84(8), 794–802. doi:10.1212/wnl.0000000000001282

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Martín, P. (2020). El efecto placebo en la historia, y su aplicación en pacientes con dolor [tesis de licenciatura, Universidad de la Laguna]. Repositorio Institucional RUILL.https://riull.ull.es/xmlui/bitstream/handle/915/20272/El%20efecto%20placebo%20en%20la%20historia,%20y%20su%20aplicacion%20en%20pacientes%20con%20dolor.%20.pdf?sequence=1

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Wager, T., & Atlas, L. (2015). The neuroscience of placebo effects: connecting context, learning and health. Nature Reviews Neuroscience, 16(7), 403–418. doi:10.1038/nrn3976

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Zhou, L., Wei, H., Zhang, H., Li, X., Bo, C., Wan, L., & Hu, L. (2019). The influence of expectancy level and personal characteristics on placebo effects: Psychological underpinnings. Frontiers in psychiatry, (10) 20, 1-10. doi:10.3389/fpsyt.2019.00020